Todos los usuarios que
recurren a los servicios de una estación de autobuses en Brasil se llevan una
divertida sorpresa al encontrarse a Chiquita, una tierna y linda perrita que
trabaja en una agencia de boletos en la ciudad de Blumenau.
Chiquita tiene 9 años y ayuda
a sus papá humano Adelsionir Mariani en el trabajo. Desde que fue adoptada,
acompaña a su familia y cumple el horario laboral como toda una empleada.
Los padres de Chiquita decidieron llevarla a diario a sus
trabajos porque no le gusta quedarse
sola en casa así que le dieron un puesto en la agencia de boletos y alegra
a todos los clientes.
Esta perrita vigila a los clientes y les saca sonrisas con su
adorable y dulce personalidad. Su papá humano Adelsionir expresó que “A ella (Chiquita) le encanta quedarse en el
mostrador de servicio, mirando a los pasajeros en línea”.
“Solo los animales nos aman sin importar
cómo nos veamos, nuestra clase social, nuestra profesión o el lugar donde
vivimos. Nada de eso les importa. Todo lo que quieren es sentirse amados
de la misma manera que ellos nos aman: incondicionalmente” agregó
Adelsionir.
Chiquita no
disminuye la carga laboral en la agencia, su labor va más allá. Ella es la
encargada de alegrar a sus papás humanos y llenarlos de mucho amor.
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