Este pez conocido como
el engullidor negro (Black Swallower) tiene una habilidad bastante especial:
puede llegar a comerse a otro pez hasta diez veces más grande, llegando incluso
a perder la vida por ello.
En el reino animal hay muchísimo animales con habilidades
impresionantes como levantar varias veces su peso corporal o volar a
velocidades de miedo, pero nuestro protagonista tiene una que a veces lo
convierte en un suicida.
Su nombre le hace gala a su súper poder. El engullidor negro
vive en las aguas profundas del atlántico, Pacífico e Índico.
Su anatomía sin nadie dentro de él es muy normal. Llega a
medir 25 cm y tiene una boca con pequeños dientes. El problema es cuando se
come a otro pez, su estómago se dilata a medidas espeluznantes.
Cuando el pez decide comerse a otro que lo supera en tamaño, es
decir, un pez de otra liga, ha llegado a perder la vida porque la víctima logra
romper las paredes de su estómago.
Al elegir un pez, expande su boca y lo empuja hacia su
estómago que a su vez comienza a dilatarse dependiendo de la talla del
infortunado pez. La digestión puede durar semanas.
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