Razones por las que un gato sangra por la nariz


El sangrado nasal en un gato es un signo de alarma, sobre todo cuando la hemorragia no cesa, por ello es muy importante averiguar la causa para poder atacar el problema de raíz. Conoce por qué ocurre y que debes hacer

La hemorragia o sangrado nasal en gatos es conocida como epistaxis felina, el término “epistaxis” proviene del griego  ‘epistazo’ o ‘epístaxis’ y quiere decir “goteo”, no es una enfermedad como tal sino más bien un síntoma que se desarrolla por la presencia de un problema o patología.


Cualquier gato puede sufrir de epistaxis en cualquier momento de su vida, aunque los jóvenes sin castrar son los más propensos, pues pasan más tiempo en el exterior y pueden presentar traumatismos por su curiosidad, enfrentamientos con otros gatos o contraer enfermedades infecciones.

Cabe destacar que un episodio de sangrado no suele ser tan grave, pero en caso de que se repita o que la hemorragia no cese, se debe acudir al veterinario para determinar la causa de la epistaxis lo más pronto posible.

Detalles importantes
Estar atento a todo tipo de cambios puede ayudar a detectar la causa de forma más rápida, entre algunos de esos detalles tenemos:
Si el gato ha dejado de comer, beber agua o incluso vomita.
Si hay deformidad en la nariz o el resto de la cara.
Si sangra por una fosa nasal o ambas.
Si presenta estornudos o secreciones nasales.
Si tiene mal aliento.
Si el sangrado se repite varias veces.

Causas leves


Las razones por las que esto ocurre pueden ser muchísimas, principalmente sucede cuando hay una ruptura de un vaso sanguíneo –consecuencia de un traumatismo o por debilidad– o por el fallo de coagulación en la sangre.

Generalmente detrás de la ruptura de un vaso sanguíneo hay causas leves, entre las cuales podemos mencionar:

Peleas entre gatos: la mayoría de los felinos son muy territoriales –sobre todo cuando no han convivido con otras mascotas–, pueden llegar a ser agresivos y peleones especialmente en la época de celo, por ende durante una pelea será normal que nariz pueda verse lastimada y comience a sangrar.

Si no es una herida tan profunda probablemente será un caso aislado que durará poco tiempo, no hay de qué preocuparse siempre y cuando el animal este vacunado contra la rabia o el VIF. También es posible que la nariz le sangre si se ha caído, golpeado o sido atropellado.

Infección nasal: es un problema común en los gatos, ya que por su instinto cazador tienden a olerlo todo.

Presencia de un cuerpo extraño: además de una infección, durante sus exploraciones olfativas también es posible que le entre algún sucio o partícula en la nariz que termine bloqueándole la fosa nasal y por ello se genere el sangrado.

Causas graves


Problemas dentales: cualquier infección en las encías o dientes puede afectar también a la nariz y a los oídos del animal ya que estos están conectados.

Envenenamiento o parásitos: si el felino consume productos tóxicos o veneno presentará entre sus síntomas un sangrado en la nariz, asimismo el cumulo de parásitos en la zona es otra razón por las que ocurre la hemorragia.

Hipertensión: este caso es más común en gatos adultos y ancianos, los cuales cuando tienen la tensión alta pueden llegar a sangrar por la nariz como uno de los síntomas.

Tumores: los tumores nasales son otra causa delicada y preocupante por la que un gato puede comenzar a sangrar por la nariz.

Esto también puede ocurrir por la presencia de enfermedades nasales crónicas – como rinitis o pólipo nasofaríngeo – o por padecer trastornos de la coagulación –bien sean hereditarios o adquiridos–-

Ante cualquier razón, es importante acudir al veterinario para que haga las pruebas pertinentes entre las cuales destacan la exploración de la boca, análisis de sangre, toma de pulsaciones y temperatura, biopsia, resonancia, etc.

Mientras más información  le aportes al médico más rápido descubrirá que es lo que el gato tiene realmente. Encuéntranos en Facebook y no dudes seguirnos

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