Es inevitable no fijarnos en las orejas de un conejo pues son una de sus características más resaltantes, sin embargo son una parte muy sensible de su cuerpo, la cual necesita cuidados pues aparecen bacterias y ácaros ¡hoy te contaremos como hacerlo correctamente!
Es muy fácil
que cualquier impureza o bacteria se introduzca en las orejas de un conejo y
propague alguna infección o enfermedad, por ello los dueños de estos animales deben aprender a mantenerlas limpias para
asegurar su bienestar.
La limpieza
de orejas es proceso sencillo pero que requiere destreza y tiempo pues el
animal podría sentirse incómodo y huir o morderte. Es necesario que exista una
buena relación entre el animal y tú, la primera reacción suele ser el miedo y
el querer alejarse, pero si confía en ti estará tranquilo y no se moverá.
¿Qué elementos necesitas para
realizar la limpieza?
Es muy sencillo: una linterna de bolsillo, pinzas desinfectadas, solución limpiadora,
gasas, algodón o paños suaves y premio para tu mascota.
Primero… ¡tranquilízalo!
Busca ayuda
Otro punto
importante antes de la limpieza es contar con la ayuda de algún familiar o
conocido, el cual debe ser de confianza
para el animal, de lo contrario tendrás que sostenerlo tú mientras tu
ayudante le limpia las orejas.
El conejo
debe ser agarrado con firmeza pero sin lastimarlo, para lograrlo puedes rodear su cuerpo con tu brazo e inclinar tu
cuerpo un poco sobre él para que no intente saltar.
Una forma de
saber si está estresado es notar si respira
de forma acelerada, tiene las orejas hacia atrás, está pateando, mordiendo o
rasguñando; si es así debes regresarlo a la jaula e intentar más tarde.
Agárralas con cuidado
No importa
si comienzas con la derecha o la izquierda, lo importante es que la tomes con
cuidado, utilizando el dedo índice y
pulgar desde el medio –no toques la punta porque es más sensible–. Para observar
el interior de la oreja enciende la linterna.
Las orejas siempre deben limpiarse desde adentro hacia
afuera, así que toma la linterna –también puedes usar la que trae tu teléfono
móvil – y revisa si hay irritaciones o algo que provoque bloqueo al oído.
Retira las acumulaciones
Para eliminar
cualquier rastro de cera, bacterias o suciedad utiliza las pinzas previamente
esterilizadas. Si el sucio está pegado a la piel no intentes tirar con fuerza
ni tampoco lo empujes hacia adentro del oído. Lo que tienes que remover debería
salir fácilmente.
Una vez
hecho esto, colócale la solución limpiadora, lo común es que estos productos
vengan con un aplicador que esparce el líquido en la oreja, tienes que evitar
que el animal mueva la cabeza durante unos minutos para que el líquido no se
bote.
Luego introduce
la gasa, paño o algodón y limpia suavemente. También puedes aplicar el producto
directamente en la gasa y después introducirla en el interior de la oreja.
Hay que
hacer este proceso varias veces para que la parte interna de las orejas quede
realmente limpia.
No olvides la parte externa
La solución limpiadora
comenzará ablandar toda la cera y
bacterias, por ello es necesario remover todo lo que salga y quede atrapado
en el exterior, en el pelaje del animal.
Una vez que
lo logres y termines es importante
intentar que las orejas del conejo no se ensucien tan seguido, para ello mantén
limpia su jaula y sus elementos personales –juguetes, comederos, bebederos–.
Por ultimo ¡prémialo!
Si el conejo
se mantuvo quieto durante todo el proceso ¡merece una recompensa! Puedes darle un snack o su comida favorita,
recuerda que para él esta situación no es algo tan agradable, así que si se
portó bien es mejor que termine con una recompensa.
Si no estás
seguro de poner realizar este proceso tú mismo, lo mejor es que acudas con un
profesional, pero eso sí, ¡nunca dejes sus orejas sucias! Más contenido en nuestro Facebook ¡síguenos!