Su pelaje lo hace
parecer un pequeño león, es de cuerpo robusto, orejas cortas y ojos en forma de
almendra. La lengua de color negra azulada es un rasgo característico de esta
raza
Es de tamaño mediano
con cuerpo robusto y cabeza amplia. La nariz es de color negro –aunque en las
razas de pelaje claro suele ser rosada–. Carece de ángulo en
sus patas traseras, por ello cuando camina sus pasos son cortos, como si
estuviera sobre zancos.
El peso aproximado en
los machos es de 25 a 32 kg y en las hembras varía entre los 20 y 25 kg. La
cola la lleva doblada sobre la espalda, el pelaje puede ser corto o largo y las
tonalidades pueden ser blanco, crema, rojo, azul o negro. Aquellos chow chow
que tienen machas o pelaje multicolor no se consideran “puros”.
Calmado e
independiente
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| A veces no nace con la lengua azul, sino que aparece a los 2 o 3 meses |
Actualmente es muy común esta raza en
hogares grandes y pequeños, es un buen perro de compañía, reservado, tranquilo
e independiente –algunos suelen compararlo con los gatos por esta cualidad–.
Es muy leal a su amo y familia, por
ello no se adapta fácilmente a nuevos dueños. Es importante
acostumbrarlo a tratar con otras personas de la mejor manera, ya que posee
un instinto territorial y sobreprotector con los seres que ama y en
consecuencia, podría llegar a ser desconfiado o agresivo con las visitas o
personas que no conozca.
No es un animal
activo, prefiere estar acostado o vigilar el lugar donde se encuentra de los
extraños. Sin embargo siempre será necesario que reciba paseos o caminatas para
fortalecer sus músculos y mente. En cuanto a los niños, el chow chow suele ser
amable y querrá protegerlo, sobre todo si se conocen desde pequeños.
Originario de China
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| Además de guardián es un hábil cazador |
El nombre “chow chow” significa
“león suave y mullido”. La historia detrás de este canino afirma que se originó
en el norte de China, además se cree que es una de las razas más antiguas que
todavía existe en el mundo.
El Chow chow suele ser
relacionado con los “perros de Foo” o “leones de Foo”, los cuales son unos
guardianes de piedra que encuentran a las afueras de los templos budistas. Esta comparación
surge de las leyendas chinas que hablan sobre un león de guerra que tenía la
lengua negra. La divulgación de ese tipo de historias a través de los años,
ha hecho que se vuelva muy común ver a este animal como guardián de templos y
hogares.
Salud y educación
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| Bañarlo excesivamente podría dañar su piel y pelaje |
Es un animal propenso a sufrir
displasia de codo y cadera, también tiene tendencia a padecer cáncer de
piel, cataratas, glaucoma, diabetes y problemas oculares como entropión
y ectropión. Su esperanza de vida se encuentra entre los 9 y 15 años.
Lo más recomendable
para esta raza es llevarlo al
médico cada 6 meses o una vez por año y mantener sus vacunas al día,
para así evitar lo más posible las patologías congénitas a las que tiene riesgo
de sufrir.
El principal problema
de comportamiento que presenta esta raza suele ser la
agresividad, para solucionarlo o prevenirlo, lo mejor es educarlo
desde que es un cachorro. Eso sí, el adiestramiento debe ser positivo,
sin gritos, regaños y con premios al final de la sesión. Esta es una manera de
poder controlar su instinto terco e independiente. No suele ser un perro fácil
de educar pero con paciencia y amor se puede lograr.
El chow chow no es un perro
bulloso ni causante de muchos destrozos, todo dependerá de lo que se le
enseñe y permita durante sus primeros años. El socializar con
personas y otros animales es vital para que sea una mascota equilibrada.
Por último, esta raza
no tolera muy bien los climas cálidos. ¿Qué piensas de este mini león? Visita
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