En los últimos años los canes de menor
tamaño se han vuelto más populares que los grandes, sobre todo en las zonas
urbanas. Sin embargo, también tienden a enfermarse muchas más veces. Por esta
razón, es importante que conozcas cuales son los padecimientos más frecuentes y
así tomar previsiones.
Diversos
estudios científicos demuestran el aumento de popularidad que en los últimos
años han tenido los perros de razas pequeñas, posiblemente porque son más fáciles de mantener, cuidar,
controlar y además caben cómodamente en hogares pequeños como los
departamentos.
Igualmente
está comprobado que tienen una esperanza
de vida más larga que las razas grandes, aunque cabe destacar que suelen
enfermarse más, debido a las influencias y alteraciones genéticas causadas por
el hombre.
Por ello, es
prudente que como un dueño responsable sepas cuales son las enfermedades más
comunes para que ante cualquier señal
actúes rápida y adecuadamente. Hoy en Oxitocina te explicamos 3:
Problemas en la rótula:
Es una de
las alteraciones más frecuentes y ocurre cuando la rótula se mueve de su posición normal –es decir se produce una
luxación–, por una variación anatómica en la rodilla afectada. Causa mucho
dolor, dificultades al andar y debilidad en la pata afectada.
Afecta
principalmente a las patas traseras y es diagnosticada rápidamente por el
especialista a través de un examen físico. Pueden padecerla hasta un 7% de los
cachorros de razas pequeñas, las más
propensas suelen ser el chihuahua, el pomerania, el caniche toy y el yorkshire
terrier.
Detectar su
presencia es fácil porque los perros
afectados suelen flexionar la rodilla al estar de pie –por lo que quedan
parados en 3 patas en vez de las 4– o dan
pequeños saltos al andar. Si alguna vez notas este síntoma no dudes en
visitar el veterinario.
Los casos
más graves requieren cirugía,
mientras que en los leves los síntomas no se presentan hasta que la mascota
tiene una edad avanzada. Algunas veces esta alteración se logra controlar con suplementos y medicamentos para las
articulaciones.
Desequilibrio en la regulación de la
temperatura
Los perros
pequeños presentan una mala regulación de la temperatura en comparación de los
grandes, se enfrían y se sobrecalientan de
forma más rápida y fácil, lo cual puede provocar una disfunción neurológica
y el riesgo de morir.
De hecho, cuando son cachorros y ancianos el riesgo
es mayor, pues no toleran para nada las temperaturas extremas. Por ello es
necesario evitar dejarlo encerrado en automóvil o en un lugar pequeño con poca
ventilación, porque sufriría las consecuencias del calor.
Ante un
riesgo de este tipo el perro puede presentar
erupciones, agotamiento, calambres y desesperación. Además, ten en cuenta
que algunos medicamentos pueden producir hipertermia.
Y cuando el
caso es temperaturas muy frías, lo
recomendable es abrigarlo, no tenerlo mucho tiempo fuera de casa y de ser
posible, mantener el hogar caliente con
la calefacción. Los veterinarios
aconsejan conservar la temperatura media durante todo el año.
Colapso traqueal
También
tienen tendencia a tener dificultades respiratorias, ya que ocurre un debilitamiento en los anillos del
cartílago traqueal, lo que genera que la tráquea comience a aplanarse,
dificultando la respiración.
Los canes con
este padecimiento presentan problemas a
la hora de recibir aire en sus pulmones y desarrollan lo que se conoce como
“tos de ganso” o colapso traqueal. La situación empeora si el animal presenta
obesidad o cuando se emociona mucho.
Las razas
más propensas son el shih tzu, el
yorkshire terrier, el Pomerania, el chihuahua y el pug. No existe una forma
de prevenir esta afección, pero de todos modos es ideal que los perros pequeños
usen arnés en vez de collar, se evite exponerlos al polvo y los olores fuertes
y además se mantengan en su peso normal.
Por ultimo no debes olvidar asearlo de forma constante,
debido a que su reducido tamaño hace que se les acumule más el sucio en las
oreja, dientes y hasta los ojos.
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