Braco húngaro, el gran cazador de Europa



Llegó el momento de conocer a uno de los perros cazadores por excelencia, el braco húngaro, originario de Europa central, el cual se ha caracterizado por su esbelta y atlética figura, pelaje corto y grandes habilidades, no dudes en descubrir las curiosidades de esta raza tan popular e imponente.

Comencemos por el origen de esta raza el cual se remonta en Hungría, se dice que los ancestros del braco solían acompañar a los miembros de la tribu Magyares. Otro dato interesante es que se encontraron evidencias de canes similares a dicha raza en el siglo XIV.


Durante la Segunda Guerra Mundial la raza por poco desaparece, según los registros, la población del braco húngaro se redujo a de una forma abismal, por poco y se extingue, pero gracias a la labor de muchos criadores, los ejemplares se multiplicaron.

Cuerpo elegante y estilizado


En cuanto a su apariencia, el braco húngaro o vizsla – como también es conocido- es todo un encanto, su cuerpo estilizado y elegante es su mayor atracción, además no hay quien se resista a su musculatura. Cabe resaltar que es un perro que goza de una fuerza descomunal.

Su tamaño es mediano pero su cuerpo tiende a ser muy largo con un lomo ancho. Las orejas suelen colgar por ambos lados, al igual que sus majillas las cuales caen por debajo de la estructura maxilar.

Muchos comparan las piernas del braco con las del galgo, pero estas suelen ser igual de largas pero un poco más gruesas. En cuanto a su cola, esta es larga y gruesa en la base. Sin duda, esta raza es muy fácil de identificar y más con el peculiar color de su pelaje que tiene un color marrón amarillento con uno que otro reflejo naranja.

Escogen a su líder favorito


Ya conoces su apariencia, ahora es el momento de que descubras su comportamiento, que resulta ser más encantador aún. Los ejemplares de la raza se estrechan lazos muy fuertes con su familia humana, de hecho escogen a una persona como su “líder favorito” y no se apartan ni un minuto de él.

Otro dato importante es que el braco húngaro es muy activo y súper curioso, no suelen ladrar mucho pero si les encanta nadar. Sin embargo, aunque lo adiestres como mascota siempre sacará su espíritu cazador, pero no hay de que asustarse.

No te dejes engañar por su silencio, suelen ser mascotas con muchísima energía por lo que necesitan una familia que sean amantes de las actividades físicas y al aire. Es un perro que le fascina correr, saltar y si no se ejercitan se entristecen.

A tener en cuenta:

Cepilla su pelaje corto frecuentemente, así tu braco lucirá un pelo fuerte y sano.
Esta raza tiene una ventaja, no suele emanar mal olor, así que debes bañarlo cuando esté muy sucio.

Debes proporcionarle juegos de inteligencia para que se desarrolle de manera completa, recuerda trabajar mente y cuerpo.

Su educación debe basarse en técnicas de motivación y refuerzo positivo, dile adiós a los métodos tradicionales.

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