Imagen cortesía Vanity Fair-Gtresonline |
A
los 18 años, la reina Isabell II recibió su primera mascota, una perrita llamada
Susan de raza corgi cortesía de su padre, el rey Jorge VI. Desde ese momento
comenzó su amor por los canes, quienes la han acompañado durante su reinado,
incluso hasta en su luna de miel ¿Puedes creerlo?
Todos se preguntarán cómo viven las mascotas de la
realeza, en este caso los canes de la reina Isabel II disfrutan de una vida
llena de excentricidades y son tratados como unos jóvenes adinerados por
quienes trabajan para la monarquía británica.
La reina con sus corgis/ Gráfica cortesía Hola |
Además de los lujos, estos perritos reciben la mayor
atención y el cuidado que puedas pensar. Cuando la reina Isabel los saca a
pasear, lleva consigo un imán para atraer los objetos en el suelo y evitar que
sus mascotas se lastimen.
Así que cuando van desde el castillo de Windsor
hasta el palacio de Buckingham, los perritos viajan seguros de que nada malo
les pasará en el camino.
Menú exclusivo
Roger Mugford,
especialista en psicología animal, relató el momento en que los corgis son
alimentados “cada perro cuenta con un menú de comida
diseñado de manera individual, que incluye un despliegue de remedios
homeopáticos y herbales. Un mayordomo se encarga de servirles su comida en una
ecléctica colección de plata y platos de porcelana”.
Mugford describió que la reina pide a los canes
sentarse en fila formando un semicírculo frente a ella y los comienza a alimentar
de uno en uno según su antigüedad.
Una fotografía de 1980/ Gráfica Vanity Fair- Gtresonline |
Los canes de la realeza tienen una dieta basada
en filetes de pechuga de pollo y solomillo de ternera, además los platillos son
preparados por un grupo de chef quienes se encargan de cocinar de manera minuciosa
para que los corgis puedan disfrutar de su comida.
Los corgis han acompañado a Isabel II durante muchos años, hasta la fecha sólo le quedan dos de los ocho que tenía. Holly y Willow son los últimos en la línea de sucesión de la corona, y con estos hermanos caninos, la reina pone punto y final a la crianza de los peludos.