Este peludo
ha sido descrito como un amante de la diversión, es activo, gracioso y famoso
por aparecer en tiras cómicas, películas y campañas publicitarias.
Pero más allá de todo esto, el Bull
Terrier posee una evolución interesante que hoy queremos contarte ¡No te
pierdas este post!
Historia del Bull Terrier
Se dice que proviene
de perros de tipo bull y terrier, que eran criados como perros de presa y de
pelea. El objetivo al hacer esta mezcla era conseguir ejemplares que tuvieran lo mejor de ambas razas.
Sus orígenes
están enlazados con James Hinks, quien, después de varios años de cruces presentó a la raza en la década de 1850.
Hinks no desistió hasta lograr no solo un perro de pelea, sino también una mascota hermosa que llamara la atención
de cualquiera.
El Bull
Terrier está basado, a grandes rasgos, en el actualmente extinto English White
Terrier. Y aunque se decía que el Bull Terrier era demasiado hermoso para las
pistas de pelea, después de verlo combatir esta afirmación quedaba deshecha.
Los primeros
ejemplares tenían un espíritu luchador increíble, incluso eran capaces de vencer a perros que doblaban su tamaño. Asimismo
fue utilizado como cazador de ratas –otro deporte sangriento y popular en la
Inglaterra de ese entonces–.
Por suerte todas estas actividades fueron prohibidas
aproximadamente en 1976 y el Bull Terrier comenzó a resaltar más en las
exhibiciones de belleza y como perro de
compañía.
Fascinación por el Bull Terrier
blanco
Los
aficionados a los perros y los jueces de las exposiciones caninas comenzaron a
mostrar parcialidad en favor de los Bull Terrier completamente blancos.
Por ello
Hinks se propuso crear una raza que fuera totalmente blanca, para lograrlo cruzó machos y hembras de este color e introdujo
–según algunas teorías– la genética del Dálmata.
Desde
entonces se consiguió que nacieran más Bull Terrier completamente blancos,
aunque hasta el día de hoy existen 2
tipos: los ejemplares blancos y las variedades de color, ambos aceptados
por la Federación Cinológica Internacional (FCI).
Se convirtió
en una moda que las clases altas tuvieran un Bull Terrier blanco a su lado,
esta raza, que es valiente, fuerte, leal, educada y amistosa supuso una
añadidura llena de estilo.
Incluso se
llegó a conocer al Bull Terrier blanco como “El Caballero Blanco”, esta aceptación resultó muy positiva para la
raza pues dio como resultado al peludo
pacífico actual, que es un hermoso perro de compañía.
Características del Bull Terrier
Personalidad
El estándar
de la raza lo describe como un perro leal,
valiente, divertido, activo y muy apegado a sus dueños. Posee una gran
fuerza física, por lo que es necesario que realice ejercicio constante.
No es un perro indicado para
principiantes ya que
requiere mucho tiempo para ser adiestrado.
Además, suele mostrarse un poco territorial frente a otros animales, así
que hay que socializarlo desde cachorro.
Rasgos físicos
Existen 2
tipos de Bull Terrier, el miniatura y el normal, este último no tiene límites
de peso o estatura, pero debe dar una impresión musculosa y fuerte. Las características más relevantes son su
cabeza ovalada y frente plana junto con sus ojos triangulares.
El pelaje es
corto y los colores aceptados en exposiciones son el blanco, negro atigrado,
rojo, leonado y tricolor. Sus orejas son pequeñas, finas y juntas entre sí, los
dientes son grandes y fuertes, las extremidades deben ser musculosas y bien
desarrolladas.
El cuerpo es
redondeado con costillas arqueadas y la cola suele ser corta, gruesa en la base
y se estrecha en una punta fina.
En
conclusión, es un perro fácil de
mantener, compañero fiel que no dudará en protegerte. ¿Te gustaría tener
uno?
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