La
cuarentena permitió a estos animales del zoológico de Hong Kong aparearse tras
una década intentándolo. El personal cruza los dedos para que pronto llegue un
panda bebé a la familia.
La
privacidad permitió que ocurriera lo que por años un zoológico de Hong Kong
anhelaba, que sus osos pandas se aparearan, y fue posible justamente en tiempos
de cuarentena donde no hay cámaras, gritos ni movimientos de visitantes.
La hembra y
el macho, llamados respectivamente Ying Ying y Le Le, venían intentando
aparearse sin éxito desde 2010, por lo que contaban con “años de aprendizaje”,
de acuerdo a un portavoz del recinto de animales.
Michael Boss,
director de conversación del zoológico de Hong Kong, dijo que los trabajadores
del lugar se sienten esperanzados de que nazca un bebé panda.
"Las
probabilidades de embarazo tras un apareamiento natural son mucho mayores que
en el caso de la inseminación artificial”, señaló Boos en un comunicado.
Un embarazo
extremadamente difícil
Los osos
pandas no son animales que tengan sexo muy seguido. El apareamiento ocurre solo
entre marzo y mayo.
Las hembras
panda maduran sexualmente a los 5 años y los machos a los 7. En el caso de
estos dos animales, tienen 14 años.
La
procreación es notoriamente difícil en el caso de los osos panda, cuya
población en estado silvestre se estima en 1.800 individuos.
Las hembras
ovulan solo una vez al año en un período muy corto de tiempo, que debe ser
detectado rápidamente por el macho. Por eso la felicidad de los miembros del
zoológico que tienen algo que celebrar en plena pandemia por el coronavirus